«A medida que Claycomb si calentaba, su actuación mejoraba, y nadie podía criticar el brillantez de su interpretación de la canción del regimiento en el primero acto, o en la escena de la lección de música en el segundo acto, a pesar de la actividad escenica que continuó a distraer alrededor de ella (de gran parte con funcionarios cómicos mudos). Claycomb, una Lucía aclamada en HGO en 2003, parecía mucho más en su elemento durante los momentos de Marie más como Lucia: su angustia al despedirse de Tonio en «Il faut partir» era palpable, y el aria cayó en cascada de ella con gran belleza y patetismo de una manera que aún no se había oído esa noche. Del mismo modo, su  «Par le rang et par l’opulence» del segundo acto era sincera y hermosa.»

WALTER B. BAILEY

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